Adherencia al tratamiento y asesoramiento médico
El control constante de una patología crónica puede mejorar la calidad de vida y aumentar la seguridad de los pacientes. Para ello es clave fomentar en el paciente el autocuidado, es decir, asumir la responsabilidad que tenemos los pacientes sobre nuestra salud. Esto incluye no sólo la toma de los medicamentos, sino también la adopción de un estilo de vida que ayude a sobrellevar mejor una IMID.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la adherencia al tratamiento como el cumplimiento del mismo; es decir, tomar la medicación de acuerdo con la dosificación prescrita; y la persistencia, tomar la medicación a lo largo del tiempo. El concepto de “adherencia” es una combinación entre cumplimiento y aceptación. Para que un paciente sea adherente al tratamiento debe adquirir un papel activo en la gestión de su enfermedad y aumentar su autonomía. Para esto se requiere que la persona con IMID conozca y entienda la patología, así como el tratamiento prescrito y la importancia de su cumplimiento.
El paciente, la familia, la comunidad, las organizaciones de pacientes y los profesionales sanitarios son factores clave para el éxito en la mejora de la adherencia terapéutica.
Papel activo del profesional médico
El paciente necesita conocer su enfermedad y entenderla, así como las características del tratamiento y la importancia de cumplirlo. Para ello es clave que exista una relación con los profesionales sanitarios (médicos de atención primaria, especialistas, enfermería, farmacéuticos) basada en la confianza y en el diálogo, facilitando su participación en la toma de decisiones.
En el caso de las enfermedades crónicas como las IMID es conveniente, además, revisar periódicamente los conocimientos en torno a la patología, su comprensión y preocupación sobre los medicamentos, ya que podrían variar en el transcurso del tiempo.
La importancia de preguntarse
Mejorar la adherencia al tratamiento es posible con una buena comunicación y relación con el profesional sanitario. Estas son algunas preguntas que los pacientes pueden realizar a su médico en relación al tratamiento prescrito:
- ¿Cómo y cuándo debo tomar el medicamento?
- ¿Por qué es importante tomar este medicamento?
- ¿Qué pasa si me confundo u olvido de tomar una dosis?
- ¿Dónde puedo encontrar más información útil sobre este tratamiento?
- ¿Existe algún sistema para ayudarme a recordar las pautas a seguir de mi tratamiento?
- ¿Qué efectos secundarios puede tener mi tratamiento?
Pero también es importante la implicación de los pacientes en el seguimiento y autocuidado de su estado de salud. Mejorar la adherencia al tratamiento es posible mediante acciones de evaluación como las siguientes:
- Establecer un horario habitual para tomar los medicamentos elimina los riesgos de tomar una dosis doble o saltarse la misma.
- Incorporar la toma del medicamento a la rutina diaria y asociar la toma a una actividad regular, como preparar el desayuno o lavarse los dientes.
- Llevar un registro de las tomas de la medicación y utilizar pastilleros, sistemas personalizados de dosificación.
- Uso de aplicaciones móviles como sistemas de recordatorios y alertas.